Trabajadores de Camuzzi levantaron el paro

Desde hoy estarán abiertas las oficinas de Camuzzi de todo el país. El gremio aceptó ayer una oferta de un aumento salarial del 24%, en tres cuotas que terminará de abonarse en octubre, y consecuentemente levantó el paro que mantuvieron durante quince días. Si bien de a poco se irán restableciendo los servicios suspendidos, los trabajadores continuarán reclamando la estatización de la firma. Después de cumplirse casi dos semanas de paro, los empleados de Camuzzi nucleados en el Sindicato de Trabajadores de la Industria del Gas Natural Derivados y Afines (Stignda), decidieron levantar las medidas de fuerza ante la propuesta salarial, que cumplió sus expectativas. El titular local del gremio, Jorge Molina, explicó que el miércoles por la tarde se reunieron en dependencias del ministerio de Trabajo en Buenos Aires, donde la empresa ofreció un 24% de incremento que se pagará en tres veces. El primero de los pagos es un 6%, retroactivo a marzo, que ya se estaría pagando; un 10% en julio y un 8% en octubre. El porcentaje de aumento no es mayor al que ya había ofrecido la firma -y rechazado por el sindicato la semana pasada-, sin embargo la "composición de los últimos números", convenció a los trabajadores que, en asambleas realizadas en todo el país resolvieron aceptar la oferta. "La empresa está en quiebra. Los trabajadores resolvimos levantar el paro no sólo por los números; sino también para despegarnos del conflicto laboral", explicó Molina. Sostuvo que continuarán reclamando la estatización de Camuzzi o una intervención del Gobierno nacional más profunda. De hecho la semana próxima habrá una movilización en las puertas de las oficinas neuquinas, para protestar por el vaciamiento que vienen denunciando. "Queremos plantear seriamente el problema del servicio, el abandono de los usuarios, la prestación irregular y la falta de seguridad que es sumamente importante", indicó. Recordó que la mayoría de los ducto están corroídos, que el gas no se odoriza convenientemente, y que falta una gran cantidad de personal para atender las demandas. Si bien el servicio de gas nunca estuvo comprometido por el paro, sí se cerraron todas las oficinas por lo que no se efectuó el cobro de boletas, ni se realizaron altas o bajas de los medidores. Desde Camuzzi habían aclarado que se correrían las fechas de vencimiento y no se cobrarían intereses para los que no hubiesen podido pagar a término sus facturas.