Audiencia pública bulliciosa

Con reiteradas interrupciones, con gritos y críticas cruzadas se realizó anoche la audiencia pública De las diecinueve personas inscriptas para hablar solamente quince estuvieron presentes. El intendente Javier Bertoldi cerró la audiencia e intentó poner serenidad al clima hostil que se respiró durante toda la jornada. Apuntaló el proyecto y refutó a algunos productores que gritaban desde afuera del recinto con los tractores en marcha, a modo de protesta. El jefe comunal dijo que “yo también vengo de sectores de pioneros, mis abuelos, que eran más respetuosos que ellos", dijo, en referencia a los chacareros que insultaban. “Necesitamos legislar y poner orden. No queremos más excepciones en el Concejo Deliberante para que después se diga que alguien se quedó con un peso en el bolsillo”. Bertoldi sostuvo que "no soy un chorro, ustedes son los mentirosos que dicen estas cosas; queremos resolver el tema, no más excepciones, no queremos quedarnos con un peso. Hay que legislar, era más fácil mirar para los costados; cuando uno quiere y ama Centenario no sólo en su parte productivo sino en un todo, planteamos esto". El resto de los oradores expusieron en contra del proyecto de ordenanza y a favor de la iniciativa, con argumentos dispares. Los detractores pronosticaron que la ordenanza derivará en la pérdida de más de 6.000 puestos de trabajo directos, y del espacio vital para la continuidad económica productiva. Los impulsores insistieron en que la ordenanza será un "cerrojo" que protegerá las áreas en producción, dará nuevas alternativas económicas de desarrollo –esencialmente turísticas y recreativas– compatibles con la producción y subsanará errores de anteriores gestiones que permitieron cercar a la producción con urbanizaciones que "crecieron como cánceres". "Basta de verso, las tierras son productivas, estén o no abandonadas", insistió el presidente de la Cámara de Comercio, Mariano Trutanich, quien exigió conocer la lista de inversores para el sector. "Se juega el futuro de la producción", coincidieron otros oradores, quienes insistieron en que el crecimiento urbanístico deberá buscarse en la meseta, no en el área irrigada. También hubo productores de acuerdo con el cambio que se impulsa, y técnicos y profesionales que propusieron "blanquear" la situación de las áreas productivas que fueron abandonadas por los productores y rodeadas por sectores de loteo. "Los que hablaron son los dueños del galpón; yo tuve que vender chacras para pagar las deudas" impositivas y laborales, dijo Emilio Vannícola, productor de 12 hectáreas y exconcejal emepenista al apoyar el proyecto. La sala estuvo colmada desde temprano. Afuera hubo maquinarias agrícolas, tractores y una gran cantidad de chacareros que siguieron por los parlantes y a los gritos, las instancias de las exposiciones que hubo en el interior del salón municipal. Mañana a las 9:30 los concejales sesionarán para votar o no la iniciativa en segunda vuelta.